
Las incidencias parecen multiplicarse en verano. Si este fin de semana un transformador de Endesa sufría un incendio en Cala en Bosch en Ciutadella, provocando un corte de suministro, la rotura de un cable subterráneo ha originado idéntico perjuicio a los abonados de la compañía eléctrica en Es Grau, en Maó.
Es Grau se quedó sin suministro ayer por la tarde y no se recuperó hasta pasadas las tres de la madrugadas, gracias a la instalación de un grupo electrógeno. Este equipo ha permitido restablecer el servicio mientras operarios de la compañía trabajaban en la reparación de la avería.