La policía local de Maó encontró este domingo el cuerpo sin vida de un hombre de 63 años y vecino de la calle Sant Esteve. Su familia había alertado unos días atrás de su desaparición ya que no tenían noticias de él.
Este domingo efectivos de la policía local y bomberos acudieron a su domicilio y lograron acceder al domicilio. Las primera hipótesis apuntan a que falleció por causas naturales.
A ver si os informais bien. Los bomberos no echaron la puerta abajo. Uno de ellos se descolgó con un arnés por el patio de luces y entró a la cocina y encontró el cadáver y desde dentro abrió la puerta a sus compañeros y policías.