Completar la delimitación del Dominio Público Marítimo-Terrestre en varias zonas húmedas de Baleares como La Gola, en Pollença; el Torrente de Sant Jordi, en Son Servera; el Prat de Lluriac y Tirant, en Es Mercadal; o el Prat del Port d’Andratx, son algunas de las tareas a ejecutar que figuran en la primera Estrategia de zonas húmedas de las Illes Balears (2023-30) que este jueves ha presentado con el conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir.
Mir ha destacado que se trata del primer documento de planificación que se redacta en el archipiélago en relación a la conservación y restauración de zonas húmedas, «unos ecosistemas clave en la adaptación a los efectos del cambio climático, desde diferentes ángulos: como sumideros de carbono, por ser refugio de biodiversidad, como filtro que mejora la calidad de los acuíferos y por el papel mitigador en catástrofes naturales como inundaciones o grandes incendios forestales». «De este modo, damos seguimiento a una serie de políticas iniciadas por este Govern que han cristalizado en la aprobación del PORN de s’Albufera, la protección de Es Trenc-Salobrar de Campos o el Plan de mejora de la biodiversidad en las depuradoras de la Agencia Balear del Agua», ha añadido.
La Estrategia identifica 359 zonas húmedas de más de 0,1 hectáreas de las cuales un 63,5% son artificiales y se concentran mayoritariamente en zonas de interior pero que son un importante atractivo para la fauna porque escasean las alternativas naturales. Los humedales naturales, en cambio, que representan un 36,5%, se concentran en la costa y ejercen como puertos de paso seguro para muchas aves migratorias y son áreas de reproducción de anfibios e insectos.
El documento se articula en seis líneas estratégicas que tienen como principal objetivo evitar, parar e invertir la pérdida y degradación de los humedales en el archipiélago y contribuir a garantizar el mantenimiento de los servicios ecosistémicos que ofrecen y de los hábitats y especies que sustentan afrontando y promoviendo su recuperación.
En cuanto a la calidad del agua que reciben los humedales, se impulsará la creación de nuevas zonas húmedas que sirvan para la gestión de efluentes industriales y de depuradoras. Además, se promoverá la instalación de sistemas de depuración complementarios que mejoren los efluentes de las depuradoras que viertan en zonas húmedas con, por ejemplo, humedales artificiales que funcionen como tratamientos terciarios asociados.
En el ámbito de la restauración, se apuesta por recuperar la extensión y calidad de los humedales priorizando la aplicación de soluciones basadas en la naturaleza para recuperar la integridad y conectividad ecológicas. Se fomentará, también, la creación y mejora de la capacidad de carga de biodiversidad.
Finalmente, el conseller ha señalado que la Estrategia hace una apuesta clara por la cogobernanza de las zonas húmedas involucrando no solo a las entidades conservacionistas sino también al conjunto de la ciudadanía y a los agentes sociales.
Además, ha hecho un llamamiento, en este sentido, a fortalecer la cooperación institucional poniendo como ejemplo la recuperación ambiental de las antiguas balsas de la depuradora de Ferreries que ejecutará el ayuntamiento, con el apoyo del Consell de Menorca una vez la conselleria ha ejecutado la retirada y traslado a la península de los lodos contaminados de la antigua depuradora.