Ayer domingo, 2 de abril, la flota de cruceros del Club Marítimo de Mahón participó en el último encuentro del Trofeo Sa Lliga Marítim, en el que estaba previsto, de acuerdo a las Instrucciones de Regata, un recorrido barlovento-sotavento, con primera señal de salida a partir de las 11.00 h.
Las previsiones meteorológicas eran complicadas: viento rumbo del 315º/330º, de unos 15 nudos de intensidad, con rachas que fácilmente se ponían en 18, llegando en ocasiones a más de 20. El comité decantó por situar el campo de regatas dentro del puerto de Maó. La línea de salida estaba situada en las inmediaciones de la isla de la cuarentena; y los barcos tenían que navegar un tramo al viento hasta rodear una baliza situada también en el interior del puerto, más o menos a la altura de la Sirenita; y bajar viento en popa hasta la zona de salida para, una vez rodeada la baliza allí situada, repetir otra vez el mismo recorrido.
La primera prueba de la jornada fue liderada cómodamente por el Alba III de Carlos M. Pons, seguido del Va Bien de Pere Triay, en cuanto a llegada; ya que, aplicados los tiempos compensados, su posición en la prueba fue terceros. Y el novel en regatas, el Asturcón Quinto de Aina Triay, reciente incorporación de la flota CMM, sorprendía con una segunda posición en la prueba. La segunda prueba del día y quinta del trofeo, contó con condiciones parecidas, pero cada vez con más viento; la sentenció el Alba en menos de una hora, y con ese tiempo, y aplicado el rating, hacía su mano de primeros, para llevarse un año más este trofeo que premia, además de la pericia, la consistencia y regularidad de la tripulación. Lo acompañan en el pódium 2023 el Va Bien de Pere Triay y el Sukita de Virginia Petrus.
Carlos M. Pons, armador del Alba III, manifestó que “estoy realmente contento de cómo se nos han dado las cosas en este trofeo. Hemos navegado de una manera muy consistente. En este tipo de trofeos es imprescindible la regularidad, participar, competir y puntuar en todas y cada una de las pruebas. Nosotros lo hemos hecho y hemos sido los mejores. La liga empezó a finales de enero y terminó el pasado domingo. Eso es mucho tiempo. Resulta complicado para la tripulación navegar todas las pruebas ya sea por motivos laborales, familiares, de salud etc. De lo que estoy más satisfecho es de que para competir cada día al máximo nivel las incorporaciones que ha habido a la tripulación del Alba III (hemos participado 11 personas en las distintas fechas de este trofeo) han resultado extraordinarias. Han navegado en el barco personas nuevas de contrastada experiencia y buen hacer en crucero, personas nuevas no tan experimentadas, pero super implicadas y que nos han ayudado un montón y también jóvenes regatistas de la clase ILCA 4 de nuestro Club que me han sorprendido muy gratamente por su saber estar, su tranquilidad, su capacidad de integración al equipo y su capacidad de concentración en la competición, han sumado muchísimo. Hemos navegado todos los días con tripulaciones excelentes, hemos cometido pocos errores, no hemos regalado ni un segundo al crono ni un metro a nuestros rivales. Estoy plenamente satisfecho del resultado obtenido”.
