Trabajadores de la prisión de Menorca se han manifestado este martes para denunciar la grave situación que vive el personal penitenciario en España. Aseguran que el Ministerio del Interior no atiende sus reivindicaciones, y que la falta de personal y recursos está provocando un aumento preocupante de las agresiones por parte de los internos.
Desde el sindicato ACAIP, los portavoces Diego Darrieux y Rubén Alonso han alzado la voz señalando que la situación ha escalado a niveles extremos. Darrieux recordó el último suceso ocurrido en la prisión de Sevilla, donde “un interno encerrado en un despacho con una psicóloga intentó violarla y matarla. Se salvó porque gritó y alguien la escuchó. Si no, estaríamos hablando de una tragedia mayor.”
“Estamos normalizando que nos agredan y esto no debería de pasar. Antes eran insultos y amenazas, ahora intentan matarnos” lamenta Darrieux que recuerda que hace unas semanas, en la cárcel de Pontevedra, un compañero recibió varias puñaladas.
Aunque en la prisión de Menorca la conflictividad es menor, sí se han producido hechos de índole sexual por parte de internos hacia trabajadoras. “A veces somos tan poco personal que una compañera imparte un curso a agresores y al funcionario que debería vigilar le mandan a hacer tareas burocráticas”, denuncia.
Los trabajadores exigen a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias medidas urgentes:
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Clasificación rigurosa de los internos.
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Botones del pánico y medios de protección.
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Refuerzo de plantilla para evitar dejar módulos sin vigilancia.
“En Menorca hay solo dos módulos, uno más conflictivo que otro. Cuando llegan internos peligrosos hay que esperar a que actúen para poder trasladarlos fuera de la isla. Es un riesgo constante.”
Hasta el momento, no ha habido respuesta oficial por parte del Ministerio del Interior a estas demandas.