Hay algunas personas que han vivido una vida emocionante. La de Margarita Comas Camps, bióloga y pedagoga, menorquina de nacimiento, fue de película: brilló con luz propia en el mundo científico y pedagógico del primer tercio del siglo XX. Ahora el ayuntamiento quiere convertirla en la segunda mujer de la galería de ilustres de la ciudad (la primera es Maria Lluïsa Serra).
Según reza la biografía de Comas, en una comunidad científica eminentemente masculina, Margarita ocupó un lugar destacado y fue considerada y respetada por sus compañeros. Desgraciadamente, su obra quedó interrumpida por el conflicto bélico de la guerra civil y el posterior exilio. Como mujer socialmente comprometida y luchadora incansable por la igualdad de oportunidades, continuó en activo, en Inglaterra, hasta el final de su vida. Desde el ayuntamiento se cree que su obra tal vez no ha sido conocida ni reconocida hasta hace poco, cuando algunas voces han comenzado a reivindicar públicamente su figura.
Con este expediente, el Ajuntament de Maó quiere reparar el injusto olvido de su figura y conseguir, al mismo tiempo, que, al igual que ocurre con el resto de menorquines ilustres que figuran en la Galería municipal, la obra y la imagen de Margarita Comas sea socialmente reconocida y convierta ejemplo y orgullo para todos, y, sobre todo, para las generaciones futuras.
Para que eso sea posible hay un periodo en el que vecinos y vecinas puedan sumarse a la petición de otorgar tal título a la profesora y pedagoga (y bióloga), basta con entrar en la web del ayuntamiento y cumplimentar una sencilla plantilla.
