2.608 alumnos de todas las Islas empiezan hoy en algunos de los 326 grupos del Programa de Acompañamiento Escolar (PAE) que ha puesto en marcha la Conselleria d’Educació i Universitat. Una vez finalizado el periodo de inscripción al Programa se ha decidido incrementar la dotación inicial con 246.320 euros más para garantizar que todos los centros que han solicitado participar cuenten al menos con un grupo. En total ha habido 181 centros (122 CEIP y 59 IES) que han solicitado grupos con un presupuesto final de 746.320€.
Por islas, en Mallorca habrá 126 centros (85 CEIP y 41 IES); en Ibiza, 32 centros (22 CEIP y 10 IES); en Menorca, 20 centros (13 CEIP y 7 IES); y en Formentera, 3 centros (2 CEIP y 1 IES).
La previsión inicial era de 220 grupos pero finalmente se han concedido 326 grupos, es decir, 106 grupos más, hasta llegar a 2.608 alumnos, 848 alumnos más que en las previsiones iniciales.
El director general de Innovación y Comunidad Educativa, Jaume Ribas, ha valorado como un “éxito esta alta respuesta de los centros y” ha añadido “que esto es la demostración de la necesidad que hay de aplicar medidas de apoyo al alumnado que tiene más dificultades para lograr los conocimientos correspondientes a su etapa educativa”. Ribas también ha anunciado que “estamos estudiando como extender esta medida en la enseñanza concertada para el próximo curso”.
El Programa de Acompañamiento Escolar (PAE), se aplica a partir de hoy, 29 de enero, y hasta el 8 de junio de 2018. Es una iniciativa que se dirige a alumnado de centros públicos de primaria, preferentemente de 5º y 6º, y de educación secundaria obligatoria que se encuentren en situación de desventaja social y que presenten dificultades de aprendizaje en las áreas instrumentales básicas y de integración en el grupo y en el centro.
El PAE se enmarca en el conjunto de medidas del Plan de Éxito Educativo que impulsa la Conselleria de Educación y Universidad y se dirige especialmente a mejorar las competencias de los alumnos reforzando las capacidades y la autonomía para que sean capaces de regular su propio aprendizaje. Se pretende aumentar sus expectativas de éxito, expectativas asociadas a la permanencia en el sistema educativo, y reducir, así, el abandono escolar.
El Programa se tiene que concretar en actividades de refuerzo y apoyo educativos en horario no lectivo realizadas por personal funcionario docente, voluntario, del mismo centro, porque son los profesores del centro los que conocen mejor los alumnos, sus circunstancias personales y su entorno familiar. De este modo también se asegura la coordinación con los profesores tutores y con el resto del equipo docente y la relación con las familias.
Se dedicará un máximo de cuatro horas a cada grupo, en horario no lectivo y que no coincida con el horario del servicio de comedor del centro, distribuidas de lunes a viernes.
La función de los profesores acompañantes es completar el trabajo realizado en el centro educativo en horario lectivo ayudando individualmente los alumnos a resolver las dificultades de diversa tipología que puedan tener en la escuela, a planificar y ordenar su trabajo escolar, a adquirir hábitos y técnicas de estudio eficaces, a ponerse al día en la dinámica del grupo clase, a mejorar los aprendizajes básicos, a trabajar técnicas para la adquisición de habilidades sociales y para la gestión de las emociones y a resolver adecuadamente los conflictos que puedan tener con otros alumnos o con sus profesores.
Los centros pedirán el compromiso de las familias para asegurar la asistencia de los alumnos a las actividades del Programa y hacer más visible, ante el alumno, el interés por su evolución escolar. También se les pedirá que se comprometan a asistir a las reuniones y a las citas individuales a las cuales estén convocadas, con objeto de mejorar, en cantidad y en calidad, la relación con el centro.
