La Audiencia Provincial de Baleares ha acordado desestimar el recurso de la Infanta Cristina contra el mantenimiento de su imputación en el caso Nóos, lo que implicará que se siente en el banquillo de acusados por presuntos delitos fiscales, siempre y cuando no se aplique la llamada doctrina Botín, que podría implicar el archivo de la causa puesto que ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado han considerado que concurre ese tipo penal.
El tribunal de la Sección Segunda, compuesto por su presidente y ponente de la resolución, Diego Gómez-Reino, y los magistrados Mónica de la Serna y Juan Jiménez, ha decidido mantener la imputación de la Infanta, en esta ocasión por dos presuntos delitos fiscales y uno de blanqueo de capitales, después de que en abril de 2013 dejase sin efecto su encausamiento por los mismos ilícitos en que habría incurrido su marido, Iñaki Urdangarin, al frente del Instituto Nóos.
Las partes personadas habían sido citadas a las 12.30 horas para que les fuera notificado el auto, a fin de evitar cualquier clase de filtración y debido a la trascendencia pública que éste podía tener. El mismo tribunal sobreseyó el año pasado la primera imputación de la Infanta -el único voto particular en contra del archivo fue el del magistrado Juan Jiménez-, si bien en esa misma resolución la Sala abrió la vía para que la Duquesa fuese investigada por presunto fraude fiscal y blanqueo de capitales.