Ferreries ha despedido la “qualcada” esta tarde después de dos intensas jornadas de fiesta. La jornada de hoy ha comenzado bien temprano, con poco antes de las nueve, con el fabioler encabezando el “replec” por las calles del pueblo. El ambiente, mucho más sosegado que el del sábado, perfecto para el disfrute de los más pequeños y los saludos entre vecinos y conocidos, se animaba con el jaleo, que ha comenzado puntual en el Pla de la Església a las 11 de la mañana.
Botes, “capadetes” y conversación, entre pomada, cerveza, queso, sobrasada o “carquinyols”, llenaban los minutos hasta que tras la entrega de las cañas verdes y las cucharitas de plata, y de las vueltas por las calles mas céntricas del pueblo, han tenido lugar la misa y la “beguda de caixers”. Tras estos momentos, el protocolo marca la despedida de Alexandra Marqués, “caixera batlessa”, de Joan Bosco Martí, “caixer capellà”, el retorno de la bandera del patrón al Ayuntamiento, el último toque de fabiol, la disolución de la “qualcada” hasta el año próximo.
Pero no había ambiente de adiós, sino de hasta luego. “Me encontré ayer a unos amigos ayer y me decían “muy tranquila te veo”, yo lo les contesté que quedaba hoy, mañana y pasada”, comentaba una vecina sobre el sábado de fiestas, justo antes que una “caixera”, que cayó el primer día del caballo, se acercara a saludar mostrando su mano hinchada. Y es que Ferreries vive el lunes uno de los días más apreciados por sus vecinos, el del “jaleo d’ases”, que está previsto a las 11 de la mañana y que se verá complementado con una fiesta de la espuma, a las dos y media, una fiesta infantil con “sa Xaranga”, a las 19.30 horas, y verbena popular, a partir de las 22.30 horas.