La Sala de lo Civil del Tribunal Supremo admitió a trámite este miércoles un demanda de paternidad contra el rey Juan Carlos I presentada por la ciudadana belga Ingrid Sartiau. Sin embargo, la misma sala, rechazó otra petición en el mismo sentido formalizada por el catalán Albert Solà. Se da la circunstancia que un test de compatibilidad genética entre los dos demandantes señala que tienen un 91% de posibilidades de ser hermanos.
En el caso de Solà hay que reseñar que nació en 1956 lo que le convertiría en el primogénito del padre de Felipe VI. El catalán afirma que Juan Carlos de Borbón mantuvo una relación con su madre antes de ser proclamado jefe del Estado por lo que sus acciones no estarían cubiertas por la inviolabilidad del monarca.
En el caso de Sartiau, su nacimiento fue posterior, entre el de la Infanta Cristina y el actual rey Felipe VI.
El rey tiene ahora 20 días de plazo para conestar a la demanda que sí se ha aceptado. Si no hay un acuerdo previo se prevé que la vista tenga lugar antes del verano y durante la misma se podría interrogar a Juan Carlos I.