La Asociación Hotelera de Menorca acogió ayer una Jornada sobre la Modernización de la Planta Hotelera con el objetivo de animar a los empresarios a poner en marcha reformas que hagan los establecimientos hoteleros de la Isla más acogedores. Luis del Olmo, experto en marketing turístico, expresó su convicción de que el futuro del sector pasa por invertir, también en clave tecnológica, a fin de ser más competitivos.
Parece mentira que tenga que venir un experto para escuchar una afirmación que por otra parte parece obvia. La inversión, la innovación, la creatividad son, deberían ser, claves a la hora de poner impulsar cualquier proyecto, más, quizás paradójicamente, si tiene carácter económico. Tan cruciales son estos elementos que hay incluso quienes sonríen con resignación cuando se les pregunta si la modernización de la planta hotelera, y no sólo, es necesaria para mejorar la competitividad del sector turístico. “Esto es un básico, lo mínimo que debe hacer un empresario”, responden.
Si estamos estamos en lo obvio, en lo básico, de abrir debates más complejos ni hablamos. Debates como el que planteaba recientemente en “Expansión” Hilario Alfaro, coordinador de la Mesa de Turismo de Madrid Foro Empresarial, tras constatar que en el sector turístico se hablara de número de visitantes, una magnitud en la que España es líder, en vez de hablar de rentabilidad y eficacia, los dos indicadores clave en el mundo empresarial, a la luz de los cuales nuestro país no sale bien parada.
A falta de valentía, sabiduría, tiempo para abordar estos debates, esperemos que, como mínimo, con el impulso de jornadas como las de ayer, los empresarios hoteleros menorquines aprovechen el nuevo marco que se abre para hacer los deberes, inviertan en sus instalaciones (y en sus equipos humanos, que ésa es otra) y estén más pronto que tarde en condiciones de abordar con coraje los verdaderos retos a los que se enfrenta el sector.