Los efectos psicológicos de la crisis económica centran la II Jornada de Psicología de Menorca que se está desarrollando este sábado en la sede del Consell, en Mahón. El encuentro pretende profundizar en cómo la actual situación está provocando un sufrimiento emocional que se traslada al plano físico lo que ha implicando un aumento de las enfermedades psicosomáticas.
José Ignacio Carreras Vinent explica que la jornada parte de la “sensación de quien dice que la crisis ha pasado es quien no la ha sufrido, la población todavía está sufriendo sus efectos”. Este psicólogo, miembro del Círculo de Psicología de Menorca, remarca que estos efectos se han dejado sentir “no sólo en el incremento de la ansiedad y la depresión, sino también en jaquecas, problemas gastrointestinales o respiratorios”.
Detrás de toda esta sintomatología estarían los despidos pero también el miedo. “Los que han perdido el trabajo son sólo la punta del iceberg, personas que sufren un cambio brusco, se abandonan, dejan de seguir una dieta sana porque no la pueden mantener, están apáticos. Pero hay mucha más gente sufriendo por la presión de producir más, la obligación de hacer horas extras sin cobrarlas o los recortes que obligan a afrontar los mismos gastos con menos ingresos”, alerta Carreras.
Sobre estas cuestiones se reflexiona todavía en el Consell, donde está a punto de finalizar una jornada que ha empezado con la ponencia acerca del tema que da título a la jornada a cargo de la psicóloga Rocío Moriana, de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Sant Lluis, y que se ha completado con dos mesas redondas, una sobre la población ante la crisis y otra sobre el desgaste emocional e buscar trabajo.