La Economía de Menorca tiene síntomas de recuperación, pero no es segura. Hay indicadores que permiten dudar de esta afirmaciín. Así lo indica el informe del Cercle d’Economia de Menorca correspondiente al cuarto trimestre de 2014 que se dio a conocer este viernes. Hay elementos alentadores como el incremento en la matriculación de vehículos que permiten augurar un aumento en el consumo. También se detecta una subida en la inversión.
Pero, por el contrario, la salida de mercancías de la Isla denota un déficit en la balanza comercial de Menorca con el exterior. Así lo señalaron Francisco Tutzó y Joan Sánchez en su exposición de la situación de la Isla.
Otros aspectos que no les gustan es que la mejora económica no está llegando a los hogares menorquines. Hay más confianza y la gente se aventura a gastar más, pero no se ha detectado un incremento en la renta de las familias que sería lo que marcaría el final real de la crisis.
Sánchez y Tutzó lamentaron también que Menorca depende cada vez más del turismo sin que se haya producido un cambio de modelo productivo que sería deseable. Entienden además que la isla todavía está en una fase de destrucción empresarial.
