
Energía desbordante para un gran concierto. Rosario Flores consiguió que su arte y su marcha llenasen los pocos resquicios que quedaban este viernes en un Teatro Principal abarrotado de gente. La artista aprovechó su paso por Mahón para regalar a los asistentes un compendio de sus tres décadas de carrera musical.
“Yo me niego”, “Algo de mi”, “Estoy aquí” o “Tu libertad”, ritmos latinos, jazz, pop, rumba, flamenco, “Como quieres que te…”, el siempre emotivísimo “No dudaría” o una despedida con toda la marcha que había derrochado en el concierto dieron cumplida respuesta a la gran expectación que había levantado la madrileña.