El obispo de Menorca Salvador Giménez deja la diócesis. El Vaticano anunció este martes al mediodía su traslado a la sede episcopal de Lleida donde se hará cargo de los fieles de allí. Salvador Giménez tiene previsto marchar en septiembre a la Seo de Lleida en donde relevará de su cargo a monseñor Joan Piris Frigola quien se jubila después de cumplir los 75 años.
Curiosamente Giménez también protagonizó el relevo de Piris al frente de la diócesis menorquina hace siete años, primero como administrador apostólico y desde 2009 como obispo. Giménez marcha de Menorca después de haber reordenado totalmente la diócesis y haber visto como nombraban por primera vez a un menorquín como santo, Joan Huguet.
Salvador Giménez ha resumido su estancia en Menorca con dos palabras, gracias y perdón. La primera por toda la ayuda y el cariño recibido y la segunda por todos los fallos que pueda haber cometido.
La diócesis menorquina queda ahora a la espera de que la Santa Sede designe a un nuevo obispo. Como el traslado de Salvador Giménez no será efectivo hasta dentro de unas semanas la isla no quedará como sede vacante. El sacerdote Gerard Villalonga queda como delegado para asuntos generales hasta que el Vaticano nombre un nuevo obispo o administrador apostólico.
Bon voyage. Muchos no lo encontraremos a faltar para nada.
Otros muchos no lo olvidaremos. Gracies bisbe Salvador.