Unas 200 tortugas mediterráneas (de tierra) procedentes de la cautividad en Menorca han sido liberadas hace unos días en el Parc Natural de Montsant en Catalunya, donde esta especie está gravemente amenazada de extinguirse.
Las tortugas mediterráneas fueron trasladadas a la península desde el GOB-Menorca, a través del Centre de Recuperació de Fauna Silvestre de Menorca que gestiona en las canteras de Líthica en Ciutadella. Además de las que llegan accidentadas del campo menorquín, que es su hábitat natural, la gran mayoría de ejemplares de tortugas de tierra que llega al Centre no procede del campo sino de la cautividad, a través de personas que un momento dado las han tenido como mascotas en sus casas, una costumbre aún extendida.
Hace unos años, en 1995, al constatarse un descenso de la población de tortugas mediterráneas en la isla (debido principalmente a las capturas masivas para su comercialización y a esa costumbre de llevárselas a casa desde el campo), desde el GOB se inició una campaña de rescate de esas tortugas que se hallaban en cautividad, para devolverlas paulatinamente a su hábitat natural.
Esa campaña surtió efecto y, ya desde hace unos años, en Menorca se mantiene una de las poblaciones más estables de toda Europa de esta especia de tortuga, llegando incluso a una saturación de ejemplares y no permitiéndose su liberación en la isla pese a su procedencia de cautividad. Pese a que ya no se realiza ningún tipo de campaña activa por parte del GOB, al Centre de Recuperació siguen llegando ejemplares de tortugas procedentes de la cautividad.
Si bien la situación en la isla es ésta, la tortuga mediterránea sigue en peligro de extinción y en otros lugares donde también tiene su hábitat natural, como Catalunya o València, están realizando proyectos permanentes para su reintroducción. Y es con estas zonas de la península con las que el Centre de Recuperació de Fauna Silvestre de Menorca mantiene convenios de colaboración, para ayudar a la protección global de esta especie destinando tortugas, siempre procedentes de la cautividad y no del campo, para garantizar su supervivencia también en otros lugares en las que también son naturales y tienen poblaciones inestables.
En este caso, las 200 tortugas mediterráneas ‘menorquinas’ llegaron desde el GOB hasta el Centre de Recuperació d’Amfibis i Rèptils de Catalunya a principios de agosto. Desde entonces, las tortugas permanecieron en ese Centre en situación de cuarentena, para controlar que no tuvieran problemas, y después, hace unos, días, fueron liberadas en el Parc Natural de Montsant.