La Junta de Gobierno del Consorcio de Residuos considera que los culpables del cierre del vertedero de Es Milà son la empresa responsable del redactado del proyecto de ampliación, Terratest Cimentaciones SLU por no haber evaluado correctamente las condiciones hidrogeológicas de la obra y también la empresa Ingeniería Geológica SL por no haber reconducido adecuadamente la situación durante el desarrollo de las obras. Esto exculpa Antonio Gomila que era la firma encargada de ejecutarlas.
La clausura del vertedero ha ocasionado hasta el momento un coste de 933.000 euros más IVA. A esta cantidad se le deberán añadir una serie de costes, que actualmente se están cuantificando y que deberán determinarse en un futuro procedimiento administrativo . Los gastos generados por estas actuaciones deberán ser soportados por los responsables de las deficiencias, en concepto de daños y perjuicios ocasionados al Consorcio.
Cabe recordar que la ampliación del vertedero se construyó sin contemplar la capa freática por lo que en días de lluvia el agua empujaba desde el subsuelo generando filtraciones de lixiviados que llegaban a las reservas hídricas.