El Parlamento Europeo ha propuesto a los zapatos de Menorca, al igual de que los de Elche o la piel de Ubrique, entre los productos que deberían optar a obtener una Denominación de Origen europea.
Después de que la cámara baja europea haya aprobado una resolución para ampliar la protección de algunos artículos artesanales y locales, los zapatos de la Isla se postulan para entrar en esta DO.
Los eurodiputados creen que esta medida “apoya al desarrollo de la economía local e impulsa el turismo, reforzando la confianza de los consumidores”.
Al margen del calzado menorquín, otros productos españoles que aspiran a esta categoría son la cerámica de Sargadelos, el damasquinado de Toledo, las esculturas falleras o las perlas mallorquinas.
Del resto de Europa, también se han propuesto el cristal de Bohemia, el mármol de Carrara o la tela escocesa, entre otros, según ha informado el portal modaes.es.