Muchísimos plásticos, una boya de pesca o un botellín de Fanta Naranja de vidrio que caducaba en 1989 fueron algunos de los residuos que recogieron los voluntarios que este pasado domingo por la mañana se acercaron hasta la playa del Pilar para participar en la jornada de limpieza organizada desde la finca pública de Alforí de Dalt en su programa de educación ambiental.
Durante la jornada, los voluntarios también tuvieron la oportunidad de conocer cómo afectan a la naturaleza la persistencia de algunos residuos si se dejan en la playa o se lanzan al mar en lugar de llevárselos y tirarlos en un contenedor a propósito. En el caso del vidrio, como podría ser este botellín de Fanta Naranja, éste puede llegar a tardar 4.000 años en degradarse en el medio natural, y otros, como las botellas de plástico incrustadas en el sistema dunar que también se encontraron, pueden tardar unos 600 años.
Las próximas actividades de educación ambiental que, gratuitas (con inscripción previa), se ofrecen desde la finca pública de Alforí de Dalt son el juego-taller familiar de los rastros del bosque, en el que se aprende a observar, identificar y reconocer las pistas que dejan los seres vivos que viven en el bosque (domingo 13 de diciembre, para adultos y niños a partir de 5 años), y la salida guiada por el itinerario Life Boscos (domingo 20 de diciembre, sólo para adultos), en el que a través de un circuito circular de 2,1 km se tiene la oportunidad de adentrarse por un bosque de encinas, seguir el torrente de la zona y ver la evolución que ha seguido la naturaleza después del incendio de 2006 en Es Milocar.