Coincidiendo con el día de la Inmaculada Concepción, patrona de la especialidad fundamental de Infantería del Cuerpo General del Ejército de Tierra, del Cuerpo Jurídico Militar y de los capellanes castrenses, la base de San Isidro en Maó ha acogido un emotivo y participado acto de celebración. El encuentro, que ha contado con una nutrida representación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y de instituciones civiles ha comenzado con una misa, tras la cual ha tenido lugar la breve pero intensa alocución.
El coronel Benjamín Oriola ha recordado diferentes episodios y personajes de la vida militar, entre ellos, Miguel de Cervantes, además de reivindicar valores y virtudes como la abnegación, el espíritu de servicio, la ejemplaridad y la disciplina, base de “un componente moral y ético que actúa como aglutinador”, que se ha desarrollar para “contribuir a la operatividad de las unidades que se emplean para defender a España y a los españoles”.
A continuación, ha tenido lugar el homenaje a los caídos por España, sin duda el momento más emotivo, y tras él un animado vino español, abierto por el brindis a cargo de Luís Alejandre, en su calidad de militar de mayor antigüedad, quien ha animado a sus compañeros “hacerse respetar y querer” por la sociedad.
