Menorca vuelve a ganar tiempo para su política de residuos. La Comisión Balear de Medio Ambiente aprobó este miércoles las obras de reforma del vertedero de Es Milà al que apenas le quedan dos meses de vida útil. El ente dio luz verde a los permisos necesarios para realizar las mejoras de la celda 3 del vertedero de Es Milà y de la balsa de lixiviados.
La decisión se tomó durante la reunión plenaria celebrada este miércoles. La propuesta que afecta a Es Milà llega como una resolución de urgencia ya que a la instalación apenas le quedan dos meses de vida útil, a menos que se puedan poner en marcha la nueva celda y la balsa.
Para acelerar los trabajos, ya se habían empezado las tareas de planimetría y se había trasladado todo el material a utilizar para ganar tiempo a la espera de obtener el permiso definitivo de la Comisión. A pesar de esta forma de avanzar en los trabajos, el conseller menorquín de Medi Ambiente, Javier Ares, reconoce que van contrarreloj.
Los problemas en la celda 3 y en la balsa de lixiviados obligaron a cerrar el año pasado este vertedero por las filtraciones que había y que contaminaban los acuíferos. Es Milà almacena todos los residuos de Menorca.