Las redes sociales han multiplicado las posibilidades del universo 2.0. Ya no sólo podemos hablar a kilómetros de distancia o mostrar nuestro estado anímico a lo largo de todo el día. Podemos opinar de todo, dando una valiosa información de forma gratuita, que bien tratada, vale mucho dinero. Las empresas lo saben. Y los gobiernos. Esto es lo que acaba de ocurrir en Cuba. Inmerso en un proceso de modernización y con un mensaje claro de puertas abiertas -solamente hay que recordar la histórica visita de Barack Obama-, el régimen liderado por Raul Castro ha contratado los servicios de una firma de la isla para analizar las deficiencias de su planta hotelera: un software “made in Menorca” ayudará a mejorar los servicios al cliente en la isla cubana.
Así, la herramienta informática Social Vane filtrará todos los comentarios sobre los problemas en los hoteles lanzados en redes sociales por usuarios para identificar aquellos más graves o que más repitan. Este programa de análisis del Big data ya se utiliza en España y en los últimos tiempos ha recibido propuestas de diversos países. Cuba es su último destino. Al menos de momento.
Os dejamos con el vídeo de demostración de la aplicación que sus creadores colgaron en Youtube.
@jlgllagues