La lucha cotidiana en el mundo de la música de Menorca busca relevo a la figura del presidente de JJMM de Maó. Félix Ferrer ha reconocido que en estos últimos años, estar defendiendo a la entidad le ha costado tiempo y esfuerzos. Más de los que se pueda uno imaginar.
Lo que motiva esta dedicación se explica por varios motivos. Uno de ellos es por la estima que tiene por la música de calidad. Mantener ese nivel que no se alimenta de suficiente presupuesto suponía un reto cada año. Hay más de una batalla que luchar. La Orquesta de Cámara de Menorca (OCIM) precisaba más atención para aspirar a un mejor futuro. Ferrer considera que ha cumplido con su cometido y espera que a corto plazo sobresalga alguna voz de entre los jóvenes músicos de la isla para enfundarse el papel que él ha desempeñado. Aunque hoy no se sabe quien recogerá el testigo.
Ferrer no descarta volver dentro de unos años, pero ahora sus metas se alejan de la presidencia de la entidad.
