El grupo ecologista GOB pone en tela de juicio el control que se hace sobre la pesca en la zona de la reserva marina del norte de la Isla. Según los datos oficiales sólo se han abierto 40 expedientes sancionadores en seis años y la sensación es que no se vigila correctamente.
De los tres cuerpos encargados del control en l,a reserva la Guardia Civil abrió 19, de un total de 204 por toda la Isla. Los inspectores de pesca realizaron 44 denuncias en este periodo en toda la Isla de las que sólo 2 se referían.a la reserva. Los tres vigilantes de la costa norte que sólo se encargan de este espacio protegido han impuesto 19 multas en total.
Desde el GOB, a nivel general, destacan que las sanciones propuestas suelen ajustarse al mínimo previsto, entre 300 y 150 euros. Puede resultar un importe molesto para aquellos que la reciben porque les haya caducado la licencia hace poco, pero parece claro que no resulta desincentivador para los que se dedican a pescar de manera furtiva y vender pescado o marisco no declarado porque los beneficios económicos serían muy superiores.
Los ecologistas opinan también que los resultados de la vigilancia han disminuido mucho en los últimos años y, por tanto, no es fácil coger reincidentes.
De los tres cuerpos analizados, Guardia Civil, Inspectores de Pesca y Vigilantes de la Reserva, quien presenta más actividad es la Guardia Civil. Este cuerpo, aunque no se dedica sólo a la mar, ha expedido 204 propuestas de sanción en materia de pesca, de los cuales 19 se encuentran dentro de la Reserva Marina.
Los Inspectores de Pesca, que dedican su labor a este sector, han tramitado en el mismo periodo 44 sanciones, de los cuales sólo 2 son dentro de la Reserva.
Por último, los tres Vigilantes que trabajan exclusivamente sobre la reserva marina, han expedido 19 propuestas de sanción.
Pero choca constatar que los Inspectores de Pesca tuvieron una gran actividad en 2012 con 21 multas, casi la mitad de las puestas a lo largo de los seis años, pero luego han tenido unos resultados decrecientes. En 2015 no tramitaron ningún expediente y en 2016 sólo tres.
Por su parte, los vigilantes de la reserva también han tenido años de muy poco resultado. Sólo abrieron 1 expediente en 2012, en 2013 y en 2015 y 2 expedientes en 2016.
Se podría hacer la lectura que la ciudadanía se está comportando muy correctamente en la reserva marina y que por ello no se expedirá sanciones, pero no es esa la sensación de ninguno de los agentes implicados en la zona, ni parece que la presencia de fauna marina tampoco confirme esta supuesta buena gestión.
De manera conjunta con Menorquins pel Territori, el GOB está preparando ahora un documento de propuestas para mejorar la vigilancia en este lugar de la isla que requiere de mayor atención.
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