El Festival de Música Antiga des Migjorn Gran ha celebrado este año su séptima edición con cuatro propuestas muy interesantes que pretenden ampliar el público de esta serie de eventos musicales, que todavía no consiguen ser del todo atractivos para los más jóvenes.
El verano es la época del año por excelencia de los eventos musicales. Ya sea como una de las alternativas para suplir la falta de fútbol en esa época o porque el buen tiempo nos invita a salir a la calle, disfrutar del aire libre y de buena música. No obstante, el festival musical celebrado en la isla de Menorca poco tiene que ver con los grandes festivales que se celebran en la península o en el resto de Europa. El Starlite de Marbella o el Barcelona Beach Festival son grandes festivales de masas, el primero, con actuaciones de grandes artistas del panorama musical actual, el otro, con las actuaciones de los mejores deejays del mundo. El Festival de Música Antiga que se celebra en las Islas Baleares atrae a un público distinto, pues también la música y el ambiente de este festival son muy distintos. Es una serie de eventos cuyo protagonista, como su nombre indica, es la música antigua y cuyo objetivo es hacer un viaje en el tiempo y dar a conocer música típica de otras épocas.
El jueves 17 se celebró “Un viatge per Itàlia”, la actuación de Eulàlia Fantova (mezzosoprano) y Ferran Pisà (tiorba) en un evento que trataba sobre Monteverdi. La propuesta del día viernes 18, “Danserie Renaissance, venez danser!”, fue a cargo de Laura Sintes. Una charla sobre cómo se bailaba en la antigüedad a partir de tratados y documentos de la época. La charla contó con un maître à danser que mostró distintos pasos y movimientos y dio paso al final del evento, con baile y música en directo a cargo de Eva Febrer, Oria Palau, Dimitri Kindynis, Nicolau Espinosa y Moisès Pelegrí. Se trata de una de las propuestas novedosas de este año, toda una demostración de bailes típicos del Renacimiento, propios de la corte de Luis XIV.
René Descartes es el protagonista del sábado día 19. El filósofo y sus pasiones son el hilo argumental de la música que se interpreta ese día, en el evento nombrado “Sentio, ergo sum”. Entre otras, podrán disfrutarse piezas de grandes músicos como Bach, Leclair, Clérambault, Telemann, Haendel y Vivaldi. Finalmente, el último día, el domingo 21, “Papá-Haydn” es el tema principal del evento con su mismo nombre y permite recuperar antiguos instrumentos como la Tiorba o el Traverso. Este festival es, desde luego, todo un viaje en el tiempo musical cuya asistencia está más que recomendada.
Cuatro días llenos de música e instrumentos de otra época forman un festival nada típico que pretende innovar cada año para mantener la atención de los asistentes. Aunque tras siete ediciones el festival sigue contando con seguidores interesados que siguen permitiendo que la celebración de este festival sea posible, se espera poder llegar a más gente y que el público aumente y sea más variado poco a poco a medida que vayan celebrándose más ediciones.