Se quejan del doble negocio de las empresas de alquiler de coches

Según el presidente de la Asociación de concesionarios de coches de Menorca, Orestes Carreras, se está notando un incremento muy sustancial de coches en el verano menorquín. La llegada de marcas que compran grandes flotas y vienen a la isla para alquilarlos en temporada ha hecho que aumente el número de vehículos en las carreteras.

Pero cuando acaba la temporada, estas empresas venden a bajo precio ciertas unidades, siendo una competencia directa para los concesionarios y aumentando la presión automovilística sobre la isla. Esta venta de coche de ocasión aumenta la presión de tráfico en las carreteras. Además va en detrimento de las empresas locales de rentacar. Ese incremento artificial del parque automovilístico de coches debe lidiar en la única red viaria importante (la carretera general) que tiene tramos en obras y otros en una eterna provisionalidad con linea amarilla que dificulta la fluidez.

Orestes también critica que el tráfico dentro de Maó, con el ensanche de las aceras en ciertas vías, dificulta el paso de vehículos por el centro. Si pillas un camión de reparto -dice Carreras- puedes esperar perfectamente veinte minutos. Además, el diseño del tráfico en la ciudad te “expulsa” del centro de la ciudad hacia el extrarradio, lo que acaba con el interés del visitante de buscar la manera de visitar Maó. Su opinión es que harían falta mejores y más amplios aparcamientos para acceder al centro. Respecto al parque automovilístico, Carreras apunta que hay muchos coches que tienen más de 10 años. La media de kilometraje en Menorca es de 7 u 8.000 km al año y los coches de hoy en día están preparados para durar más. De hecho, en la península hacen hasta 4 veces más kilómetros.

Respecto a la matriculación, las cifras distan mucho de los años buenos. En 2001 se alcanzó un tope con algo más de 7.400 vehículos matriculados en Menorca y el año pasado se superó apenas los 1.500. Pese a todo, la estadística se va recuperando lentamente desde 2.008