Pep Bou es un mago de las pompas de jabón. Poco se imaginarían sus padres que jugando así llegaría tan lejos. El éxito le acompaña, el aplauso del publico infantil (y el de sus padres), y años de ir perfeccionando las técnicas que permitan hacer cosas nuevas con el jabón. Su vinculación a Menorca nos hace pensar que quizás alguno de sus espectáculos los imaginó en nuestra apartada isla.
En definitiva todos hemos jugado de pequeños a hacer pompas, cuantas más mejor. Cuanto más grandes, mejor. En eso Pep Bou nos gana. Las suyas son tan espectaculares que nos deja a todos con la boca abierta. Pero más allá de la fórmula del jabón que utiliza (seguro que no era el que teníamos nosotros en casa), o de el grado de humedad del ambiente necesario para que no se rompa antes de tiempo, la compañía de Pep Bou crea historias que se pueden contar gracias a esas pompas.
Así, los dos actores que entran en escena en Clinc! incorporan toda una serie de artilugios que nos llevan a un mundo de pompas. Máquinas de vapor, lugares por donde se mueven las pompas como si tuvieran vida propia, un espacio en el que pueden convivir humanos y esos seres amorfos y blanditos. Además los juegos de luz van a darles una dimensión alucinante. El espectáculo se para cuando se hace clinc y se explota la burbuja. Pero si no se acaba el jabón, puede que el clinc no sea el final aún.