La celebración de la festividad de los Santos Ángeles Custodios en Maó, patrones de la Policía Nacional, tuvo lugar este lunes prácticamente en familia. La mayoría de políticos y representantes institucionales declinaron la invitación tras los sucesos de Catalunya del domingo.
El acto celebrado en la Dirección Insular de la Administración General del estado en Maó notó con ausencias destacadas. Nadie del equipo de gobierno del Consell de Menorca acudió a la cita. Este mismo lunes la presidenta en funciones, Maite Salord, condenaba la actuación policial del domingo en Catalunya y anunciaba la entrada de un escrito de repulsa para que se haga llegar hasta el Gobierno central.
De los ocho ayuntamientos de la Isla sólo los dos bajo control del PP, Es Castell y Alaior, enviaron representantes. La alcaldesa de Sant Lluís, Montse Morlà ya había anunciado que “no tengo nada a celebrar ni con la Policía Nacional ni con la Guardia Civil” el próximo 12 de octubre cuando celebran su patrona. En el Ajuntament de Maó todos los concejales a excepción del de Ciudadanos firmaron un documento sobre lo ocurrido en toda Catalunya en el que “se rechaza cualquier actuación que suponga el uso de la fuerza”.
Todo ello no pasó desapercibido para el director insular de la Administración general del Estado, Javier López-Cerón quien valoró estas faltas de asistencia con un “allá cada uno con su conciencia”. Más tarde añadió que “los cargos institucionales deben representar a toda la población y no sólo a unos”.
López-Cerón también señaló en su discurso que quienes más critican ahora al cuerpo son quienes primero llamarán a la Policía cuando lo necesiten.
El director también califico de “muy tristes” las imágenes que se pudieron ver en las cargas policiales aunque aseguró “romper una lanza en favor del cuerpo ” y justificó sus actuaciones.
