Manuela Cañadas, portavoz de “Mos vomem Mallorca”, ha expresado su rechazo “absoluto al decretazo” del Govern, aún por aprobar, que exigirá el conocimiento de la lengua catalana a todos los empleados de la sanidad pública.
“Venimos en representación de los ciudadanos anónimos y del personal sanitario del Ib-Salut”, ha reivindicado Cañadas, que ha dicho que el único interés de la presidenta del Govern, Francina Armengol, en la negociación de este decreto con sus socios del ejecutivo de MÉS es “conservar su puesto, su asiento, que es lo que hacen los políticos”.
A su parecer, lo que debe hacer el Govern, antes de imponer este decreto, es “negociar con los ciudadanos”, que están en “contra de que se politice todo y, en este caso, la sanidad con la imposición del catalán”.
“No vamos a admitir un maquillaje del decreto, la sanidad no puede estar ligada a las lenguas”, ha defendido Cañadas, que ha añadido: “No puede ser” que una carrera universitaria puntúe “igual” que un curso de catalán.
Cañadas ha recordado la manifestación que se celebrará en Palma el próximo día 18 contra la aprobación de este decreto y ha dicho que “basta ya de engordar los ficticios Països Catalans; queremos sanitarios que nos curen, hablen la lengua que hablen”.
Finalmente, la portavoz de esta entidad ha recordado que nunca se ha producido ningún conflicto lingüístico en la sanidad pública balear por el hecho de que los profesionales se expresen en catalán o castellano.
PREGUNTA EN EL PARLAMENT
El PP ha llevado esta cuestión al Parlament. La diputada Núria Riera ha acusado al Govern de “asustar a miles de profesionales” con el requisito y se ha preguntado qué pasará con todos los profesionales que entren pero no acrediten el catalán en dos años -como en principio, marcará el decreto tras intensas negociaciones entre PSIB y Més- ¿qué hará, los echará?”
Por su parte, la consellera de Salud, Patricia Gómez, ha recriminado al PP que hable de “imposición” con el decreto del catalán cuando durante su legislatura aprobaron el Tratamiento Integral de Lenguas (TIL).
Así ha respondido este martes en sesión plenaria la consellera a la diputada del PP Núria Riera sobre su valoración del “rechazo frontal a la imposición del catalán en la sanidad por la mayoría de la ciudadanía”.
Igualmente, Gómez ha insistido en que el decreto “destaca las singularidades del sector sanitario y permite excepciones” para garantizar que se cubran las plazas.
“Trabajamos en el decreto, dialogamos y consensuamos”, ha indicado la consellera de Salut, tras criticar que al PP le preocupe que falten médicos “cuando echaron a 1.400 personas en su legislatura”.
Además, Gómez ha afirmado que el Govern no hace política por el catalán “sino a favor de las personas” y ha asegurado que los ciudadanos “no se olvidan de que quitaron las tarjetas sanitarias y el decreto de garantía de demora”.