El expediente abierto por el departamento autonómico de Turismo concluye que el comportamiento de Airbnb supone una infracción muy grave, dado que la empresa ha sido advertida reiteradamente de que estaba cometiendo una ilegalidad, pero no ha cesado en su actividad, informa el Govern en un comunicado.
El de Airbnb es el primer expediente sancionador por infracción muy grave en Mallorca en virtud de la Ley de Turismo, que desde 2012 prohíbe el alquiler vacacional de viviendas en edificios plurifamiliares, aunque no fue hasta su reforma del año pasado que se estableció un régimen concreto para hacer efectiva esta prohibición.
La plataforma multinacional de alquiler por internet fue informada de las prescripciones de la ley, con un primer requerimiento el 16 de agosto tras comprobar que seguía incumpliendo la norma.
En noviembre se volvió a constatar el incumplimiento de la ley y en diciembre se advirtió a Airbnb que si en 15 días no corregía su actuación se exponía a una sanción de entre 40.001 y 400.000 euros.
El acta que justifica la multa de 300.000 euros fue levantada por la inspección turística el 1 de febrero y recoge la publicidad en Airbnb de 20 viviendas de Mallorca sin los requisitos legales.