La Guardia Civil ha procedido a la detención de un hombre de 32 años, como presunto autor de un delito de secuestro, amenazas, coacciones, lesiones y quebrantamiento de condena.
El día de ayer, agentes de la Guardia Civil de Marratxí (Mallorca), intervinieron ante el secuestro de una persona en la localidad de Palma de Mallorca, a la que le querían sustraer la elevada cantidad de dinero. La detención se produjo in fraganti en el momento que el ahora detenido, acompañaba bajo amenazas de muerte a la víctima de 42 años, hasta un cajero cercano al lugar donde permanecía encerrado, un piso en las inmediaciones de la calle de Alfonso el Magnánimo.
Los hechos se remontan al pasado lunes 26 del febrero, cuando el ahora detenido mediante engaño, logró llevarse a su domicilio a la víctima para una vez allí encerrarla y propinarle en días consecutivos varias palizas, logrando de esta manera que le llevara hasta un cajero automático, en donde realizó varias extracciones diarias de 600 euros, al ser esta cantidad el máxima permitida.
Mientras permanecía encerrado sufrió palizas, amenazas, incluso llego a agredirle con un cuchillo de cocina.
En una de las salidas a los cajeros automáticos, la víctima observó la sede de la Cruz Roja muy próxima a su lugar de cautiverio, este detalle fue vital, ya que en un momento de despiste de su secuestrador, se hizo con el teléfono y mandó un mensaje a su padre, informándole de lo sucedido y de la amenaza de que lo matarían si no pagaba.
Una vez que el padre se puso en contacto con la Guardia Civil, se montó un dispositivo de vigilancia en las cercanías del lugar que describía la víctima, resultando que varias horas después se localizaba al autor junto a su pareja, mientras trasladaban a la persona secuestrada, la cual apenas podría mantenerse en pie, hasta el cajero de una entidad bancaria. En ese momento los agentes se abalanzaron sobre el secuestrador procediendo a su detención.
En el momento de la detención se localizó en el pie del autor una pulsera de localización GPS para agresores de violencia de género, resultando que la orden de alejamiento era sobre la mujer que se encontraba con él en ese momento.
La víctima fue trasladada hasta un centro hospitalario donde le trataron la rotura de varias costillas y del tabique nasal, además de numerosos golpes y cortes por todo el cuerpo.
El día de hoy, el detenido ha sido presentado ante la autoridad Judicial de Guardia de Palma de Mallorca que decreto prisión sin fianza.