Los técnicos del Consell de Menorca extirparon el año pasado 40 toneladas de plantas invasoras para impedir que afecten a las especies endémicas de la Isla. Pero los trabajos continúan. Ahora centran sus esfuerzos en los acantilados de Sa Mesquida. Allí se están extirpando colonias de carpobrotus, la planta conocida popularmente como patata frita. El carpobrotus es una especie procedente de Sudáfrica que se aprovecha del clima mediterráneo, muy parecida a la de su hábitat original, pero sin los competidores naturales. Esto hace que se pueda extender sin freno y amenace las plantas propias de Menorca. Se introdujo en la Isla por cuestiones de jardinería ya que su flor es muy vistosa pero no se tuvo en cuenta que allá en donde arraiga crea una alfombra natural que impide a otras especies crecer y desarrollarse. Esto obliga a los técnicos del Consell a revisar periódicamente las zonas en donde se han extirpado los carpobrotus para comprobar que no rebrotan ya que, de lo contrario, podrían volverse a extender por la Isla. Ahora se está trabajando en el tramo entre Sa Mesquida y La Mola gracias a una aportación de 150.000 euros del Govern balear. |