Las vacaciones son un buen momento para compartir tiempo y espacios con nuestros hij@s. Los horarios dejan de ser tan rígidos y podemos disfrutar de otro tipo de actividades.
Esto es lo ideal, aunque hay casos en los que los días de vacaciones suponen un descuadre en la vida familiar ya que la conciliación brilla por su ausencia.
Para estas familias que deben organizarse hay alternativas interesantes que pueden ser una solución. Como ludotecas municipales que ofrecen actividades para edades diferentes. Escuelas privadas de extraescolares que ofrecen también semanas de ocio con horario matinal.
Cada vez tenemos, por suerte, más alternativas para no sobrecargar a los abuelos u otros familiares.
Estas alternativas de ocio y juego, fuera del ámbito puramente escolar aportan a l@s niñ@s un espacio de autoconocimiento muy interesante para su crecimiento. Interactuarán con otros niñ@s que posiblemente no conocían, desarrollando así sus habilidades sociales. Resolverán otro tipo de retos a los que no están habituados. Otros hábitos nuevos.
Y experimentarán nuevas situaciones, haciendo de esto una alternativa muy positiva: vacaciones activas.
