La oferta de coches de alquiler sin conductor en el mes de agosto de 2017 en Balears, momento del año donde el parque móvil de alquiler es mayor, era de 85.700 vehículos y la ocupación calculada, según la información facilitada por las empresas era del 87%, unos 74.200 coches de alquiler. Así lo indica el informe “Impacto de los vehículos de alquiler en las Islas Baleares”, encargado por el Govern a la empresa Meteoclim.
El documento resalta que el parque móvil de residentes de las Islas Baleares es muy numeroso, con uno de los números de vehículos por habitante más alto de todo el Estado. El parque móvil residente contaba en agosto de 2017 con unos 705.500 turismos, y se encontraba en aumento acelerado.
Del total de empresas de alquiler que operan en las islas, 259 se encontraban inscritas en los registros insulares a finales de 2017, con un total de casi 76.000 vehículos registrados. Aunque en Baleares operan más de 350 empresas, aproximadamente el 80% de los vehículos de alquiler pertenecen sólo a 15 grandes empresas.
Las grandes empresas y la reventa de coches
En la memoria, MeteoClim calcula que el 76 por ciento de los coches de alquiler disponibles en las islas son de empresas que realmente basan su negocio en la compraventa de vehículos nuevos que operan como vehículos de alquiler poco más de medio año. Un modelo de negocio en el que, según apunta la empresa, es más rentable cuanto más vehículos se hagan circular por las islas y, añade, bajan los precios para conseguir que circule el mayor número de vehículos posible.
La investigación realizada por la empresa considera que determinados beneficios fiscales explican este modelo, ya que, la acumulación de rebajas y beneficios fiscales permite que el vehículo pueda ser revendido a un precio superior al de adquisición. Según las estimaciones de MeteoClim, el total de turismos operados durante el verano de 2017 por grandes empresas que se dedican a la compraventa asciende a unos 64.900 coches.
Propuestas para disminuir el tráfico de coches y límites competenciales
El estudio también propone medidas que podrían contribuir a disminuir el número de vehículos de alquiler circulando por las carreteras de las islas y especifica que si se quisiera establecer un límite, debería hacerse siguiendo criterios territoriales y también de capacidad de carga de las carreteras.
La memoria de la investigación, reconoce las dificultades para establecer un límite de vehículos de alquiler a causa de las normativas estatales y comunitarias y, en cualquier caso, especifica que si se quisiera hacer, habría que dimensionar el límite en el parque global de vehículos de las Islas y cuánto podría crecer el parque durante el verano.
En cuanto a la imposición de un límite en el número de coches de alquiler, la pertenencia a la Unión Europea no permite discriminar los vehículos de las empresas de alquiler respecto de los vehículos particulares de los residentes, ya que atentaría contra la libre circulación de mercancías y el principio de igualdad. Sólo se pueden imponer restricciones cuantitativas cuando éstas estén justificadas por un interés general no económico.