El sueño de una noche de verano que dura 30 años, de aire tibio y cielo vibrante en medio del campo menorquín que han sabido mimar y vender, de confianza y fidelidad, de suerte y habilidad para reunir gente adecuada en los sitios adecuados, de fomentar una “piña” capaz de soñar sueños ajenos.
Alcaufar Vell fue este sábado, 14 de julio de 2018, el escenario de ese sueño que son los 30 años de Bonnin Sanso. Juan Torres, acompañado de su socio Collin Guanaria, su familia y un buen número de clientes y amigos,celebró en el hotel rural lluïser las tres décadas de andadura de la agencia inmobiliaria de referencia en Menorca. Lo hizo en un ambiente distendido, con delicioso aperitivo y música suave, el complemento perfecto para una velada de sentidas emociones. Las tradujo en palabras –“que me salen del alma”, según confesó- Josema Yuste, uno de los clientes-amigos de Bonnin Sanso, protagonista de algunas de sus campañas publicitarias, quien destacó el gran equipo de la inmobiliaria y su buen hacer, además de animar a los hijos de Torres- Juan Mateo, Verónica y Kerry- a mantener el buen hacer que ha sido signo de indentidad de la empresa desde su fundación en 1988. Torres agradeció la intervención de Yuste, en la que reconoció “muchas verdades, historias que son realidades”, pero, sobre todo, la confianza que han depositado miles de clientes en estos 30 años y la entrega de un equipo innovador que ha conseguido cerrar todas sus operaciones con “un grado de satisfacción elevado”. Y fiel a su estilo, directo y franco, con la voz teñida de sonrisa, no quiso despedirse sin confirmar a los asistentes que está dispuesto a seguir soñando mucho tiempo. La velada también sirvió para anunciar nuevos planes de expansión de la inmobiliaria que, en breve, abrirá oficina en Sant Lluís. Una más que se sumará a la red que ya tiene en Maó, Es Castell y Ciutadella. |