El gasto global del conjunto de pensiones llegó a superar el 8 por ciento interanual en la antesala de la crisis (2008). Desde hace unos años, el gasto venía creciendo a un ritmo próximo o superior al 3 por ciento. Hay que remontarse a los años 2013, 2012 y 2011 para encontrar una tasa interanual de gasto en pensiones superior al 4 por ciento.
A partir de la nómina de agosto, las cuantías derivadas de la subida de las pensiones contemplada en los Presupuestos Generales del Estado de 2018 están ya consolidadas.
Los Presupuestos, que entraron en vigor en julio, contemplaban un aumento del 3 por ciento para las pensiones mínimas, del 1,6 por ciento para el resto de pensiones y la ampliación de la base reguladora de las pensiones de viudedad para quienes no perciban otra pensión pública del 52 por ciento al 56 por ciento.
El pasado 27 de julio la Seguridad Social abonó a los pensionistas los atrasos derivados de la subida de las pensiones recogida en los Presupuestos para este año, pagando así la diferencia entre la subida del 0,25 por ciento que experimentaron las pensiones el 1 de enero de este año y el aumento del 1,6 por ciento para todas las pensiones y del 3 por ciento para las mínimas, no contributivas y SOVI contemplada en Presupuestos.
Por su parte, los pensionistas de mínimas, no contributivas y del SOVI recibieron en julio los atrasos correspondientes a la diferencia entre la subida aplicada a sus prestaciones a principios de año (0,25 por ciento) y la contemplada en Presupuestos (3 por ciento).
La mayor parte de los casi 9.218 millones de euros destinados a pagar la nómina de las pensiones en agosto fue a parar a las pensiones de jubilación, con 6.549,7 millones de euros (+5,3 por ciento), seguidas de las pensiones de viudedad, a las que se dedicaron 1.601,9 millones de euros (+4,78 por ciento en contraste con el +1,27 por ciento del mes anterior).
Desde el pasado 1 de agosto, algunas pensiones de viudedad, en torno a medio millón, las más bajas, aumentaron su cuantía como consecuencia de la subida de la base reguladora del 52 por ciento al 56 por ciento.
Al pago de las pensiones de incapacidad permanente se destinaron 909,2 millones de euros (+2,3 por ciento), las de orfandad supusieron 133,8 millones de euros (+2,9 por ciento) y las pensiones en favor de familiares totalizaron casi 23,2 millones de euros (+5,7 por ciento).
MÁS DE 9,6 MILLONES DE PENSIONISTAS
El número de pensiones avanzó en agosto un 1,1 por ciento respecto al mismo mes de 2017, hasta 9.638.029 pensiones, nuevo récord del sistema. En términos mensuales, el número de pensiones se incrementó en 8.540 respecto al mes de julio de 2017, un 0,08 por ciento más.
Aunque la tasa de crecimiento interanual del número de pensiones no es de las más altas dentro en la serie histórica de la última década, con ella ya se acumulan 31 meses consecutivos de crecimientos superiores al 1 por ciento.
Del total de pensiones, más de la mitad, 5.941.425, fueron pensiones de jubilación, con un repunte del 1,77 por ciento respecto a agosto de 2017, mientras que 2.360.235 eran pensiones de viudedad (-0,07 por ciento), 953.257 de incapacidad permanente (+0,4 por ciento), 341.298 de orfandad (-0,27 por ciento), y 41.814 a favor de familiares (+2,2 por ciento).
Como es lógico, la subida adicional de las pensiones para 2018 recogida en Presupuestos también ha impulsado al alza la cuantía de las prestaciones, que reflejan un ritmo más elevado de crecimientos interanuales en comparación con los meses anteriores.
Así, la pensión media de jubilación se situó al inicio del presente mes en 1.102,38 euros mensuales, un 3,46 por ciento más que en igual mes de 2017, frente al avance interanual del 1,92 por ciento que registraba en julio. Trabajo ha destacado que las nuevas altas de jubilaciones, con datos esta vez a julio, recogen una cuantía media de 1.305,29 euros mensuales.
Por su parte, la pensión media del sistema, que comprende las distintas clases de pensión (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares) se situó en agosto en 956,42 euros mensuales, lo que supone un aumento interanual del 3,7 por ciento, en contraste con el incremento del 1,8 por ciento del mes de julio.
La pensión media de viudedad se situó en el octavo mes del año en 678,73 euros mensuales, un 4,85 por ciento más que en igual mes del año pasado, mientras que la de incapacidad permanente alcanzó una cuantía media de 953,86 euros mensuales, con un incremento interanual del 1,86 por ciento.
Asimismo, la pensión media de orfandad ascendió a 392,08 euros mensuales, un 3,2 por ciento más que en agosto de 2017, mientras que la de a favor de familiares se situó en 555,2 euros al mes, con un repunte del 3,49 por ciento.
LA PENSIÓN DE JUBILACIÓN DE LOS VARONES, 452 EUROS MÁS ELEVADA
La edad media del pensionista contributivo es de 72 años (73 en las mujeres y 70 en los varones).
La mayor parte de las pensiones contributivas que paga la Seguridad Social se concentran en los tramos de mayor edad, dado que el grueso de las pensiones son de jubilación.
Así, se contabilizan más de 1,7 millones de pensiones contributivas en el tramo de 65 a 69 años y en el de 70 a 74 años; casi 1,6 millones en el de 85 y más años; cerca de 1,3 millones en el de 80 a 84 años, y más de 1,3 millones en el de 75 a 79 años.
Por sexos, el 51,5 por ciento de las pensiones contributivas del sistema (4.970.288) las reciben mujeres, frente a 4.667.619 pensiones percibidas por varones (48,5 por ciento).
La pensión media de jubilación percibida por mujeres alcanzó en agosto la cuantía de 821,95 euros, en contraste con los 1.274,4 euros mensuales que reciben de media los varones. La brecha entre ambos sexos, en valores absolutos, es de 452,4 euros.
De las más de 9,6 millones pensiones contributivas existentes en agosto, una de cada cuatro (el 24,7 por ciento, más de 2,3 millones de pensiones) reciben complemento a mínimos. Este porcentaje se eleva al 31 por ciento en el caso de las mujeres, dado que sus pensiones son más bajas, y se sitúa en el 18 por ciento en el caso de los varones.
De las pensiones que reciben complemento a mínimos, el 44,8 por ciento son pensiones de jubilación; el 29,8 por ciento de viudedad (en julio este porcentaje era del 30,7 por ciento); el 12,3 por ciento de jubilación procedente de incapacidad; el 6,5 por ciento de orfandad; el 5,4 por ciento de incapacidad permanente, y el 0,9 por ciento a favor de familiares.
A ello hay que añadir 1.313 pensiones del SOVI que reciben mínimos y que representan únicamente el 0,4 por ciento del total de pensiones contributivas.