El equipo de gobierno de Maó empieza a valorar la instalación de un pantalán en la península de La Mola para recibir a los turistas de grandes cruceros. Así lo anunció este martes Radio Menorca-Cadena SER.
La estrechez del puerto de Maó impide la entrada de buques con una eslora mayor a los 275 metros ya que no pueden virar en su interior. No obstante las administraciones ya trabajan en una solución que pasaría por una pequeña instalación en La Mola.
La propuesta la lanzó Autoritat Portuaria de Balears en el último Consejo de Navegación del Puerto de Maó. Según declaró el primer teniente de alcalde de Maó, Héctor Pons el consistorio ya la está analizando. Pero Pons apunta que debería ser una instalación simple y desmontables que se pudiera retirar fuera de temporada. El edil apuntaba la instalación de un pantalán y un pequeño puesto de control de seguridad.
Su cometido sería que los grandes cruceros, cada vez más usuales en el Mediterráneo, pudieran fondear en el exterior del puerto y proceder al desembarco de pasajeros por medio de lanchas lanzaderas que trasladarían a los turistas hasta La Mola. Sería un trayecto mucho más corto que si tienen que navegar hasta el muelle de Maó. Una vez en tierra les esperarían autobuses que ya les llevarían hasta la ciudad de Llevant o a la excursión que hubieran contratado.
Pero Pons también insiste en que cualquier actuación debe tener el máximo respeto por el entorno de la antigua fortaleza del siglo XIX ya que es un importante patrimonio cultural.
No obstante desde el consistorio se prefiere que los cruceros de un tamaño adecuado puedan entrar al puerto hasta el pie de la ciudad. Pons recalca que, normalmente, los barcos de un tamaño medio o algo inferior acostumbran a transportar turistas de mayor poder adquisitivo.
En este sentido, el teniente de alcalde apostilló que las grandes líneas de cruceros tienen previsto ampliar su flota de buques de menor eslora en los próximos años.
