Vivir cerca del mar y conocer desde niño la cultura del reciclaje fue decisivo para que el belga François van den Abeele tuviera una idea que, con mucho trabajo posterior, se convirtió en la empresa Sea2see.
Este innovador empresario ya seguía “proyectos de revalorización de desechos y veía que había un problema en el mar con los residuos que se tiraban. La moda es la industria más contaminante, después del gas y el petróleo” y él decidió unir la moda con la sostenibilidad, dos conceptos que se combinan en la creación de las gafas elaboradas con plástico reciclado que comercializa su empresa.
“En la óptica se utiliza mucho el plástico pero no se tiene en cuenta la sostenibilidad. En Sea2see hemos llegado a acuerdos con la cofradías de pescadores y nos hemos asociado a un gestor de residuos. Así, tenemos contenedores en los puertos donde se recogen los residuos que se trasladan a un almacén, cerca de Girona, y allí se realiza la separación de los materiales plásticos para su posterior utilización”, explica van den Abeele convencido de que el consumidor compra estas gafas más por la historia que tienen detrás que por la moda.
“Una sociedad de likes”
“El ego es muy importante en nuestra sociedad, yo digo que vivimos en una sociedad de “likes”, a través de las redes sociales. Y tenemos que usar el ego de las personas de forma positiva, que se sientan identificados con el proyecto, que se sientan orgullosos de participar en él” señala van den Abeele.
El empresario asegura que “el producto está muerto porque los consumidores buscan más experiencias que marcas. El nuevo consumidor busca otras cosas, sentirse parte de un proyecto, conocer de dónde viene, cómo se hace, quiere saber la historia de lo que compran. El producto está muerto si no hay una historia detrás”.
François van den Abeele participa en la nueva edición de Innovem que se celebra mañana, 9 de noviembre. Allí hablará sobre “Eco-innovación” y sobre su proyecto de gafas sostenibles. “Se trata de demostrar que se pueden hacer las cosas de otra manera, con un mayor impacto ecológico y social, de generar un pensamiento distinto ahora que se ha iniciado el cambio en el proceso que sigue el consumidor antes de comprar”.