Sonrisa Médica ha hecho un balance “positivo” del primer medio año de funcionamiento del programa en el Hospital Mateu Orfila, en el que, a través del humor, trata de aliviar el dolor de los más pequeños.
Consideran que los payasos “Conductor insulina” y “Bombó Katrina” han logrado humanizar el entorno hospitalario y que su presencia en el centro ha tenido una excelente acogida por parte de los pacientes.
Durante el día semana de intervención los payasos visitan la planta de pediatría y otros servicios y unidades donde se requiere su presencia.
Los representantes de Sonrisa Médica que hoy han visitado el hospital -Guillem Morlà, presidente, y José Antonio Fayas, vicepresidente por Menorca- han hecho un llamamiento a las administraciones, empresas y particulares para que se hagan socios de la entidad.
Buscan consolidar una iniciativa que se puso en marcha gracias a las ayudas recibidas a través del programa de subvenciones de la campaña del IRPF concedidas por el Govern balear.
“El gran reto es poder dar continuidad indefinida al programa y, si es posible, incrementar a dos los días de intervención en el Mateu Orfila. Para eso esperamos contar con la ayuda y complicidad de los menorquines”.