La muerte del residente en el geriátrico de Maó J.A.M el pasado 3 de enero fue debida a un lamentable y desafortunado accidente. Así lo indica el informe emitido pro el Ajuntament de Maó en sus conclusiones. J.A.M. falleció tras caerse por una escalera con la silla de ruedas.
En su informe interno, el consistorio señala lo siguiente:
“- En el momento de los hechos, en la Residencia estaba el personal de guardia habitual, formado por 8 auxiliares de geriatría y una enfermera, que atendían con normalidad a los 85 residentes del centro.
– A pesar de que se desplazaba en silla de ruedas, J.A.M. a menudo se movía por el centro de manera independiente y sin necesitar la ayuda de nadie.
– Las grabaciones de las cámaras del centro muestran que J.A.M. abrió solo las puertas de cristal que dan acceso al rellano del ascensor y también las puertas de la escalera de emergencia, con el objetivo claro de acceder a este espacio. Hay que aclarar que las puertas de acceso a la escalera de emergencia estaban cerradas pero, lógicamente, siempre se pueden abrir.
– También se ha constatado que, en todo momento, el personal del centro siguió los protocolos establecidos, sin que se haya detectado ninguna incidencia en este sentido.
– En consecuencia de todo lo anterior, todo hace pensar que los hechos ocurridos se deben a un desgraciado
accidente, y que J.A.M. se precipitó por las escaleras de manera fortuita, aunque a estas alturas la investigación de los hechos está en manos de las autoridades policiales y continúa abierta.”
Desde el consistorio se asegura también que la Residencia Geriátrica cumple la normativa vigente, pero el Ajuntament estudiará la puesta en marcha de medidas complementarias para evitar que hechos de esta naturaleza se puedan volver a repetir.