La familia Taylor viajaba de Menorca a Birmingham pero cuando subieron al avión se encontraron que tenían que “sentarse en el suelo porque el espacio donde debía estar sus asientos estaba vacío”. Así lo explican en el programa Rip Off Britain: Holiday, de la BBC One.
Cuando todos los pasajeros del avión estuvieron en sus asientos solo quedaba uno libre que los Taylor cedieron a su hija mientras ellos ocupaban asientos plegables en el área de la tripulación. Pero, según cuentan, “una vez que el vuelo despegó, la tripulación empezó a servir comida y otros artículos que estaban guardados detrás de esos asientos, por lo que el matrimonio Taylor tuvieron que salir de ahí y sentarse en el suelo, en el espacio en el que debían haber estado sus asientos. Brooke, su hija, se les unió, ya que no quería sentarse sola”.
La familia explica en la BBC que la tripulación del avión les agradeció su comprensión pero que TUI, el touroperador responsable del vuelo, se limitó a devolverse una pequeña parte del importe que habían pagado por los billetes. Hasta que los Taylor conectaron con el programa Rip Off Britain, entonces “TUI les reembolsó las tarifas completas” y les explicó que “los asientos asignados a la familia no estaban disponibles debido a un “cambio de avión de último minuto” y a que el avión alternativo tenía una configuración de asientos diferente”.
Este suceso ocurrió el pasado mes de junio y la Autoridad de Aviación Civil de Reino Unido está investigando el caso.
