La presidenta del Consell, Susana Mora,ofreció en el Ple de la Diada del Poble de Menorca un discurso en el que conjugó tanto la reivindicación, como la reflexión sobre la política actual y la necesaria aceptación de responsabilidades por mucho que uno no sea el culpable de lo ocurrido.

Mora empezó su parlamento con una  reflexión sobre los objetivos de la vida política. De entrada asumió que la clase dirigente debe recuperar la confianza del ciudadano y pidió que todo el mundo aprenda a ser generoso para llegar a consensos en temas importantes a través del diálogo aunque sea renunciando a parte de los ideales. También hizo un llamamiento al respeto a la diversidad de pensamiento y la tolerancia.

Pero tras estas reflexiones generales, la presidenta empezó a tratar  cuestiones muy concretas como la necesidad de un Régimen Especial para Balears que equilibre temas como el transporte de mercancías. Solicitó a la sociedad en general que se den oportunidades laborales a los jóvenes de Menorca para evitar la fuga de talento. Tampoco se olvidó de reivindicar una mejor conectividad aérea.

En este sentido recalcó que el descuento del 75% para los residentes supone una mejora, pero que es necesario seguir luchando para lograr unas tarifas justas.

También habló del ‘cap de fibló’ que dejó a buena parte de la Isla sin luz durante tres largos días. Mora destacó el comportamiento ejemplar y cívico de los menorquines ante esta situación, pero sentenció con un “Mai més” que esto no volverá a pasar. Y lo hizo tras asumir que, a pesar de  que fue un fenómeno natural y, por ello, absolutamente imprevisible, los gobernantes no podían eximirse de  la responsabilidad de sus efectos. 

Mora también tuvo unas palabras para las mujeres menorquinas olvidadas por la historia a pesar de que ellas también ayudaron al desarrollo de la isla tanto con trabajo físico como con la creación cultural.