El Govern balear ya ha licitado la prueba piloto para destinar agua depurada a los acuíferos como forma de reaprovechar el líquido. El proyecto, que se desarrollará en Sant Lluís cuenta con una partida inicial de 490.000 euros. Esta iniciativa ya se anunció en noviembre pero ahora es cuando sale a exposición para que las empresas puedan pujar por el contrato.
La prueba piloto consiste en utilizar agua de la depuradora de Sant Lluís e infiltrarla en los acuíferos de la zona para constatar a medio y largo plazo la mejora del líquido resultante. Se ha elegido esta población tanto por la calidad del agua que sale de la depuradora como por el hecho de la falta de una industria pesada que pueda contaminar el subsuelo.
El contrato se divide en cuatro lotes y tiene una duración de 20 meses. Los primeros ocho son para estudios previos y pruebas de diagnóstico. El año siguiente es cuando tendrá lugar la insuflación de agua en los acuíferos.
Una vez constatados los resultados de la prueba y el coste económico se mirará la posibilidad de utilizar este sistema en diferentes puntos del archipiélago.
Este sistema ya que, recuerda, se utiliza también en zonas de Alemania, California y Catalunya con un notable éxito.