El grupo ecologista GOB pide regular la normativa sobre el agroturismo después de que en Son Vell, Ciutadella se vaya a construir un establecimiento con 109 plazas y 56 habitaciones lo que le convertiría en el alojamiento más grande de la Isla vinculado al sector agrícola.
Los ecologistas recuerdan que el agroturismo se admitió como una forma de complementar la renta agrària, però permitir una reforma de un predio para habilitar 56 habitaciones y 109 plazas no convence al GOB que teme que todo sea una fórmula para urbanizar el campo y que transformaría la meta principal de Son Vell que dejaría de ser el trabajo agrícola para dedicarse al turismo.
Entre los temas que más soliviantan al GOB está la reforma de ‘bouers’ y otros inmuebles para acoger habitaciones. “Es indignante” llegó a declarar el coordinador del GOB, Miquel Camps, que edificios de apenas 8 años se vayan a reconvertir en alojamientos. Para Camps ni son inmuebles que ya han perdido su uso agrícola ni han tenido tiempo para envejecer y precisar de una reforma.
De momento el GOB ya ha pedido revisar todo el expediente para constatar si los inmuebles afectados, entre ellos los de 2011 se construyeron con subvenciones públicas. También piden modificar la normativa al respecto para evitar maniobras especulativas dentro del campo isleño.
Entre las medidas solicitadas destacan la regulación de un número máximo de plazas de alojamiento en agroturismos de la Isla o que las estructuras que se reformen para habilitarlas como plazas turísticas deban cumplir con ciertos parámetros como una antigüedad mínima. De lo contrario, temen, se pueda usar esta fórmula para llenar el campo menoquín de hoteles lo que escaparía a la intención inicial de los agroturismos.
Miquel Camps alerta que en Menorca hay una veintena de proyectos de agroturismo en tramitación lo que podrian inundar las zoneas agrícolas de inmuebles y servicios que nada tienen que ver con el campo