El informe definitivo de la autopsia ha confirmado que Julen, el niño de dos años que murió tras caer a un pozo en una finca de Totalán (Málaga), falleció por la caída en el agujero.
La autopsia ha confirmado que Julen, encontrado tras una intensa búsqueda de 13 días, murió tras caer al pozo. Con ello se descarta que la muerte se debiera a la acción de la piqueta que fue utilizada en las labores de rescate.
Como se recordará, Julen cayó el domingo 13 en un pozo de 25 centímetros de diámetro y unos 70 metros de profundidad. Tras una búsqueda exhaustiva y laboriosa, el pequeño fue encontrado a los 13 días. Ahora se trata de delimitar las posibles responsabilidades pues el pozo no estaba tapado.