En su perfil de la red social se presentan como un grupo de camareras de pisos (LAS KELLYS) que se unen para reivindicar sus derechos, tales como la regulación de carga de trabajo, jubilación anticipada a los 58 años o reconocimiento de las enfermedades laborales.
En Menorca hay un numeroso grupo de trabajadoras (prácticamente la totalidad son mujeres) que forman parte de un Movimiento que existe ya desde hace casi tres años en nuestro país.
Es una Asociación autónoma y que apuesta por la autoorganización, está integrada por camareras de piso y por amigos y familiares de éstas y lucha a partir de objetivos comunes.
Las Kellys tiene como objetivos dar visibilidad a la problemática de las camareras de piso, así como contribuir a la mejora de su calidad de vida. Sus principales reivindicaciones son:
- Jubilación anticipada: que se establezcan coeficientes reductores para tener pensiones decentes; reconocimiento de trabajo penoso.
- Reconocimiento de enfermedades profesionales directamente relacionadas con el aparato motor y músculo esquelético.
- No a la externalización: exigen la modificación del artículo 42 del Estatuto de los Trabajadores para garantizar la igualdad de contratación y la incorporación a la misma de la Ley Kelly para impedir la cesión ilegal de trabajadoras.
Y que el mismo INEM gestione la bolsa de trabajo. - Blindaje de los Convenios de Hostelería. No quieren que se reconozcan en ningún caso a las empresas multiservicios como parte legítima del sector.
Incremento del número de inspectores laborales en todo el territorio español. Inspecciones aleatorias, castigo a los expedientes irregulares y que los mismos no puedan optar a las bolsas de trabajo institucionales. - Cumplimiento del capítulo III de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y así mismo la Ley de Coordinación de Actividades Empresariales y se realicen los estudios ergonómicos para calcular y limitar las cargas de trabajo según las características de cada hotel.
Cumplimiento de las categorías reconocidas en el Acuerdo Marco ALEH. - Cumplimiento del artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores (ET) puesto que lo contrario impide conciliar familiar y socialmente. Así como lo referente en el artículo 55 del mismo ET en relación al embarazo.
- Vincular la categoría de los hoteles a la calidad del trabajo que se genera en los mismos. Actualmente la normativa para establecer la categoría es autonómica y sólo establece los metros mínimos, si tiene que haber teléfono o caja fuerte, pero no existe nada que les obligue a tener unos estándares laborales óptimos.
En Las Kellys hay mujeres diversas: algunas de ellas están en paro, otras en activo, algunas están de prácticas, otras cobrando, algunas son eventuales, otras están fijas, algunas trabajan en plantilla, otras para una empresa externa, algunas tienen contrato de media jornada, otras de ocho horas, algunas están afiliadas a diferentes sindicatos, otras a ninguno, algunas son españolas, otras extranjeras, algunas son camareras de piso, otras ocupan otros rangos en el departamento de pisos.
Algunas de ellas llevan muchos años trabajando de camareras de piso y les preocupa su salud y en qué condiciones van a jubilarse, otras llevan menos tiempo y les preocupa no repetir una vida laboral igual o peor que la de sus predecesoras.
Incluso padecen un trato laboral que, en los momentos punta de la temporada turística cuando aumenta el trabajo, puede ser llegar a ser abusivo, como cuando existía la esclavitud.
Así pues, las mujeres del movimiento Kelly Menorca alzan ahora la voz, coincidiendo con la campaña electoral, solicitando a los políticos que atiendan sus peticiones.