Sólo 67 pasajeros repartidos en 32 camarotes. Así de exclusivo es el crucero turístico Le Ponant, de la naviera del mismo nombre y pabellón francés, que este domingo tocó brevemente el puerto de Maó. Llegó poco después de las 8 de la mañana procedente de Palma y en media hora volvía a zarpar con destino a Oristano.
El buque destaca también por sus tres mástiles que permiten desplegar un imponente velamen que regresa a quienes disfruten de la travesía a tiempos más antiguos. Dispone de 88 metros de eslora, 12 de manga y tres cubiertas accesibles para el pasaje. Una treintena de tripulantes atienden las necesidades de los viajeros.
En dicho espacio hay dos restaurantes, The Karukera dedicado a la cocina francesa y Le Diamant para comidas más informales. Además posee dos salones, The Emeraude es el principal para temas de actividades diversas mientras que The Saphir es una zona de lectura con ordenadores conectados a internet.
Le Ponant ha sido el tercer crucero que hace escala en Maó este fin de semana ya que el sábado atracaron en el puerto el Seabourn Odyssey que llegó de Palma y marchó hacia La Valetta y el Black Watch que procedía también de Palma pero que salió hacia Málaga.