La firma del convenio entre el Govern y el Consell con el que el PSOE y Més per Menorca han dado por liquidado los conflictos del pago de las sentencias derivadas de un PTI de 2003 “devastador y del chapucero sistema de bestretes, ambos frutos de políticas irresponsables socialistas”. Así lo valora el PP.
A juicio de los populares este es el epitafio a una legislatura perdida que, entre otras cosas, se ha caracterizado por la nula capacidad de negociación y el escaso peso político del Consell Insular ante el Govern, debilidad que “ha sido aprovechada por el centralismo mallorquín para marcar, uno tras otro, goles por la escuadra a la primera institución menorquina”.
Para la presidenta insular del PP y candidata al Consell, Misericordia Sugrañes estos “goles” a los que hacía referencia son: un traspaso de promoción turística regresiva y mal dotada, medio millón de euros perdidos en el traspaso de Dependencia, desequilibrios en las inversiones que se realizan en una isla u otra, ni un euro para pagar las dos sentencias millonarias de Cesgarden y Princesa Son Bou cuando los menorquines estamos pagando las sentencias de Mallorca e Ibiza y los 8,5 millones que debía el Govern al Consell en concepto de anticipos no pagados a pagar en ocho años, a razón de un millón al año son todo ellos ejemplos de que no se puede hacer peor a la hora de defender los intereses de los menorquines.
“El Consell renuncia al contencioso por las ‘bestretes’ por un mero interés electoral de presentarse con este asunto resuelto. Había base jurídica para seguir defendiendo lo que es nuestro porque si no, no se interpone un contencioso. Cabe recordar que en las ‘bestretes’ hasta se pagó el convenio para el transporte público”, ha señalado Misericordia Sugrañes. “Lo último que nos faltaba por ver en este asunto –ha continuado- es que los menorquines hemos de pagar los intereses por un dinero que nos debe el Govern desde hace muchos años cuando el Govern tiene superávit millonario y ha gestionado 4.000 millones de euros más que nosotros en cuatro años. Hasta en esto nos han metido un gol”. “Los menorquines necesitamos un gobierno fuerte que no se arrugue y que sea capaz de negociar con éxito”, ha concluido Sugrañes. La responsabilidad de este 2×1 perjudicial para Menorca y que ha supuesto otro fracaso del tripartito se reparte a partes iguales entre PSOE y Més per Menorca, partido que aceptó retirar modificar una enmienda en el Parlament cuando el Grupo Popular había manifestado su apoyo, con lo que Menorca hubiera cobrado 14 millones por Cesgarden y Princesa Son Bou sin necesidad de retirar el contencioso por las bestretes.
“Los que se llena la boca de que no dependen de nadie, en realidad dependen del PSOE y se pliegan una y otra vez a sus intereses políticos. Con nuestros votos, Menorca hubiera cobrado de forma inmediata 14 millones de euros mientras el litigio de las bestretes corría su camino”.