El Servicio de Transfusión del Hospital Mateu Orfila ha obtenido la cuarta recertificación de la práctica transfusional por parte de la Fundación CAT. Esta certificación incluye el control de calidad y seguridad de todo el proceso de conservación, distribución y transfusión a los pacientes.
La Fundación CAT es un organismo de certificación en el ámbito de transfusión de sangre, terapia celular y tisular, que destaca por ser imparcial e independiente y estar avalada por las sociedades científicas del ámbito de la hematología y la transfusión sanguínea. Desde 2010, cuenta con la acreditación ENAC que le otorga validez internacional.
La doctora Pilar Galán, jefa de la sección de Hematología y Hemoterapia del Hospital, asegura que contar con un certificado de calidad es muy gratificante por el gran esfuerzo que requiere por parte de todo el personal, pero sobre todo aporta credibilidad y confianza en los pacientes desde el momento que todos los procesos responden a unos criterios de calidad y seguridad reconocidos y avalados por las sociedades científicas. “Esta certificación reconoce que todos los procedimientos relacionados con la transfusión se realizan siguiendo los parámetros que establece la legislación vigente y sobre todo, basados en un objetivo de seguridad transfusional y mejora continua de los profesionales”, explica la doctora Galán.
Entre estos procesos, hay que destacar los siguientes:
• La bioseguridad, con la minimización de riesgos infecciosos y biológicos.
• La seguridad en las pruebas de compatibilidad entre el receptor y el donante en las transfusiones.
• La existencia de protocolos de actuación en caso de accidentes y de emergencias sanitarias.
• La calificación, capacitación y actualización permanente de la formación de todos los profesionales.
“Esta recertificación nos obliga también a ir siempre un paso por delante, en no bajar la guardia en los controles y la mejora continua del servicio y la formación de los profesionales para la acreditación, que recibimos el pasado mes de abril, y tiene una vigencia de tres años a partir de los cuales se ha de ir renovando “, añade la doctora Galán.
El servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Mateu Orfila cuenta con un equipo formado por cuatro médicos, una enfermera y cuatro técnicos de laboratorio que trabajan en turno de mañana y dos técnicos más que cubren los turnos de atardeceres, noches y festivos. El cuarto médico especialista del servicio se ha incorporado al equipo a principios de este mes de junio.
En cuanto a la actividad de 2018, en el Hospital Mateu Orfila se hicieron las siguientes transfusiones:
- 1.864 unidades de concentrado de hematíes
- 123 “pools” de plaquetas
- 52 unidades de plasma fresco
Se trata de cifras muy similares a la media de la actividad registrada en los últimos 10 años. En el Hospital Mateu Orfila, la mayor demanda de procesos de transfusión de sangre se concentra en el tratamiento de enfermedades hemato-oncológicas; los tratamientos de quimioterapia y los procedimientos quirúrgicos.
La doctora Galán comenta que las prácticas transfusionales han evolucionado mucho en los últimos años y actualmente se trabaja en lo que se conoce como políticas de ahorro de sangre. Como producto biológico y escaso, se aplican criterios más restrictivos de manera que se optimiza más el recurso: se da sangre siguiendo procedimientos de máxima seguridad a los pacientes que realmente lo necesitan y en las cantidades correctas. “No siempre es mejor una transfusión. A veces, en función de la patología, es preferible optar por un tratamiento farmacológico “, asegura la doctora Galán.