“Los operadores turísticos han ordenado a los hoteles que no coloquen huéspedes en habitaciones donde la barandilla del balcón esté a menos de 1,1 metros, o donde haya brechas en las barandillas que podrían usarse para escalar“. Así explica el sensacionalista diario británico Mirror las nuevas condiciones que los touroperadores ponen a los hoteles para albergar turistas ingleses.
La fotografía que ilustra el artículo es de la web oficial de los alojamientos Menorca Binibeca cuyo director señala que “las reglas de TUI y Jet2 significan que los huéspedes británicos no pueden quedarse en habitaciones con balcones que no cumplen con los nuevos requisitos de altura“. Y destaca que “en lugares como Magaluf ha habido multitud de accidentes, habitualmente después de que los clientes hayan bebido y traten de escalar a las habitaciones de sus amigos. Pasa cada año en temporada alta. A partir de ahora, si alguien insiste en pedir una habitación con balcón, le haremos firmar una exoneración de responsabilidad”.
Las muertes que se producen cada año, sobre todo en Mallorca, de turistas británicos que caen desde los balcones de sus habitaciones del hotel o los apartamentos donde pasan sus vacaciones han alertado a los directores de los establecimientos turísticos. Hace unas semanas un joven británico demandó a un hotel y solicitó una indemnización de 37.000 euros por haberse “roto la clavícula al resbalar en la piscina”. Poco después descubrieron que era una estafa ya que se había tirado desde el balcón de su habitación.
Según Mirror, “los jefes de los hoteles y las empresas de viajes temen reclamos legales de varios millones de libras” por los heridos y fallecidos practicando “balconing“.
